Daño típico a la cocina.
La mayor parte del daño generalmente se puede encontrar en el área de la encimera, pero los frentes de la cocina también se desgastan de vez en cuando. Los daños típicos aquí son:
- Peculiaridades
- Arañazos o abolladuras
- manchas
- pelar revestimientos
- asas rotas
- bisagras de puerta rasgadas
Todos estos daños a menudo se pueden reparar bien y fácilmente. Por lo tanto, le mostramos algunas opciones valiosas de reparación y reemplazo en la siguiente sección.
Reparar frentes
En muchos casos, los frentes dañados se pueden cambiar de forma sencilla y económica. Muchos fabricantes conocidos ofrecen frentes de repuesto para sus modelos de cocina, a menudo muchos años después de que la cocina se retirara de la gama actual.
Es incluso más fácil con las cocinas IKEA: allí puedes comprar piezas frontales para la mayoría de los modelos de cocina individualmente y, por lo tanto, reemplazar gradualmente un frente dañado.
Frentes de lámina
Se pueden cubrir muchos daños muy fácilmente filmando la cocina. Un efecto secundario agradable: puede cambiar el diseño de la cocina a su gusto, y los materiales de muy alta calidad (que se muestran de forma fotorrealista) son adecuados para el diseño de la cocina: ya sea de ébano, mármol o pizarra, las láminas lo hacen posible sin ningún problema.
El frustrado no lleva mucho tiempo y es muy económico de realizar. Como regla general, no tiene que gastar más de 30 EUR por metro lineal de cocina.
Kits de reparación
Para superficies de madera real, puede usar fácilmente masilla para madera para reparar si tiene abolladuras, abolladuras o rayones. Si se elige bien el color, el daño apenas se nota después.
Para todas las demás superficies hay kits de reparación especiales con los que se pueden eliminar los daños de forma muy profesional. Muchos de estos conjuntos están disponibles en tiendas a partir de unos 40 EUR. También se pueden utilizar para otras pequeñas reparaciones, por lo que la compra suele merecer la pena.
consejos y trucos
Puede volver a colocar fácilmente las bisagras o manijas de las puertas rasgadas quitando la parte rasgada de la madera y rellenándola con material de relleno duro y duradero (como resinas de relleno estables)