El tipo adecuado de leña para un buen fuego
La madera maciza y seca de roble y haya se quema de forma especialmente prolongada e intensa, pero pasa bastante tiempo antes de que este material se incendie. Las maderas más inflamables como el pino y el abeto son más adecuadas para encender la estufa.
Utilice madera blanda bien seca con un contenido de humedad de alrededor del 15%. La leña nunca debe tener un contenido de agua superior al 25%, lo cual está prohibido por la Ley Federal de Control de Inmisiones. Los trozos de madera deben ser lo más desiguales y angulares posible para que las llamas puedan agarrar mejor.
La lana de madera y los trozos de corteza son aún más fáciles de encender, a menudo sirven como aceleradores de fuego adicionales. Guarde siempre una cierta cantidad de leña y pequeños restos cerca del horno para secar más este material y al mismo tiempo tenerlo siempre a mano.
Ayudas de encendido para un encendido rápido
La leña por sí sola a menudo no es suficiente para una iluminación rápida y completa, varias ayudas de iluminación ayudan a generar llamas suficientemente grandes. En épocas anteriores a la gente también le gustaba usar papel y cartón para encender el fuego, pero esto ya no está permitido.
Las siguientes ayudas de encendido completamente legales están disponibles en ferreterías, así como en varias tiendas de descuento y en línea, aseguran un desarrollo efectivo del fuego:
- almohadillas de lana de madera empapadas en cera
- Cubo más ligero con petróleo
- Virutas de pino (virutas de madera resinosa)
Así apilas la leña correctamente
Para que la estufa funcione rápidamente, por lo general no es suficiente simplemente juntar las leñas y las ayudas para encenderlas y encenderlas de alguna manera. Una capa específica aporta mucho más:
- Coloque un tronco plano y ancho en el piso de la estufa, colóquelo a lo largo o, si es demasiado grande, en diagonal a la abertura.
- Ahora coloque dos encendedores en la superficie de este tronco.
- A continuación, agarre la leña: colóquela como una especie de tipi alrededor del tronco en la parte inferior, apuntando diagonalmente hacia arriba para que las puntas se junten.
- Asegúrese de tener suficiente espacio para alcanzar el encendedor con el encendedor o fósforo.
- Ponga la estufa a pleno suministro de aire.
- Ahora encienda la ayuda de encendido y espere hasta que el fuego se extienda permanentemente a la madera.
- Solo ahora vale la pena agregar madera dura o briquetas de madera, que pueden alimentar el fuego a largo plazo.
Con este truco el fuego se desarrolla aún mejor
Si apila su leña de tal manera que el fuego encuentre tantos puntos de ataque como sea posible y al mismo tiempo también reciba suficiente oxígeno de los espacios intermedios, podrá esperar llamas ricas con especial rapidez.
consejos y trucos
En fases particularmente frías, la chimenea se enfría relativamente rápido durante la noche, lo que dificulta el encendido de la estufa al día siguiente. Mantenga las brasas activas por la noche con briquetas de carbón masivas y encienda el próximo fuego con el calor existente.